miércoles, 31 de octubre de 2012

Magdalenas de yogur y miel

 


En estas tardes frias de otoño, en que anochece un poco antes por el cambio horario, no hay nada tan placentero como  acomodarte en tu sillón preferido, con una buena lectura,  una cálida mantita , un café con leche bien caliente y unas magdalenas recién salidas del horno.


 Alguien comentó en su blog que un blogger que se dedica a la cocina, nunca repite receta. En las comidas del día a día, supongo que todos repetimos recetas, porque si además de pensar en el menú , en la compra, en el número de comensales que ese día comerán en casa... además tenemos que pensar en preparar un plato original ,  sería demasiado ¿no?
Pero es verdad que si pensamos en una receta que vamos a subir al blog, esta ha de ser nueva.
Tengo varias recetas de magdalenas, algunas inmejorables para mi gusto, pero no, quería algo nuevo que subir al blog. Buscando, encontré estas magdalenas  en el libro de Xavier Barriga, "Magdalenas" y aunque se han resistido a encopetarse, lo cierto es que están muy ricas.



 INGREDIENTES:

 (Para 20 magdalenas)

  • 2 huevos
  • 150 gr de azúcar
  • 50 ml de leche 
  • 190 ml de aceite de oliva suave
  • 230 gr de harina
  • 1 sobre de levadura (15 gr)
  • 50 gr de miel
  • 60 gr de yogur natural griego
  • 1 pizca de sal

 


ELABORACIÓN:

Batimos los huevos con el azúcar y la miel, hasta que todo esté bien integrado.

Incorporamos la leche, el aceite y el yogur. Seguimos batiendo.

Tamizamos la harina, la levadura y la sal y se lo vamos añadiendo poco a poco a la mezcla mientras batimos.

Dejamos reposar en la nevera durante 1 hora.

Precalentamos el horno a 200º

Ponemos las cápsulas de las magdalenas dentro de un molde rígido, para evitar que se deformen. Con ayuda de una manga pastelera o una cuchara, llenamos las cápsulas 3/4 partes de su capacidad.

Introducimos en el horno y bajamos la temperatura a 180º, con calor arriba y abajo y dejamos hacerse durante 25 minutos.







La lectura: "Fortunata y Jacinta" de Benito Perez Galdos.
Una de las novelas de la España contemporanea que más me gusta, no solo por el realismo que el autor imprime a sus personajes, el detallado relato de las costumbres  y del momento histórico, la pluralidad social tan bien captada; sobre todo me atrae la ambientación de ese Madrid ( mi Madrid ) costumbrista de la segunda mitad del siglo XIX.





Feliz Día de Todos los Santos y/o Halloween



    

jueves, 25 de octubre de 2012

Tarta de calabaza y coco

  




 Después de unos días soleados y calurosos, regalo del veranillo de San Miguel, el otoño hace acto de presencia en Madrid. Los árboles, ya moteados de verde y amarillo, empiezan a desprenderse de sus primeras hojas y las calles y parques se colorean y tapizan con tonos anaranjados, marrones, ocres y rojizos. Las nieblas de las primeras horas envuelven en un aire de misterio  la ciudad y el ambiente se llena de multitud de aromas: a tierra mojada, a madera, a hojarasca, a leña, a setas...

Hoy el cielo se ha tornado gris y plomizo, descargando una lluvia cadente y suave unas veces e intensa y brusca otras.
En días así, lo que más me apetece es "meterme en harinas", encender el horno y preparar un rico dulce para compartir con mi familia, con un humeante café o colacao entre las manos.

Con una hermosa calabaza sobre la encimera, mi receta dulce no podía tener otro protagonista y más en estos días, en que la calabaza es la reina absoluta de los blogs de cocina.
Es una tarta deliciosa y muy jugosa, donde el sabor dulce de la calabaza combina a la perfección con el toque y aroma del coco rallado.

 



 INGREDIENTES:
  •  500 gr de calabaza ya cocida y escurrida 
  • 100 gr de aceite de oliva suave
  • 3 huevos gordos
  • 150 gr de azúcar (reservar unos gramos para decorar)
  • 100 gr de coco rallado (reservar unos gramos para decorar)
  • 100 gr de harina de repostería
  • 1 sobre de levadura química
  • 1 pizca de sal


 



ELABORACIÓN:

 
Quitamos la piel y las pipas a la calabaza y la troceamos en cuadraditos. La ponemos en un bol de cristal y lo cubrimos con papel film. No le añadimos nada de agua. La cocemos en el microondas durante 10 minutos a máxima potencia (comprobad si está cocida o necesita algún minuto más)
También podemos cocerla en una cacerola con un poquito de agua.

Veréis que una vez cocida suelta mucha agua, aunque no le hubiésemos puesto nada, yo no se lo escurrí, sino que chafé la calabaza con un tenedor y la removí bien  para que se mezclase. En caso de cocerla en una cacerola con agua sugiero que la dejéis escurrir un poco. La dejamos enfriar.

Con unas varillas manuales mezclamos el puré de calabaza con el aceite, hasta que nos quede una crema fina. Seguimos mezclando mientras añadimos los huevos de uno en uno y la sal.

En otro bol, mezclamos: el azúcar, el coco, la harina y la levadura, hasta que estén integrados todos los ingredientes.

Unimos ambas mezclas.

Vertemos el contenido en un molde (el mío es de 22 cm) encamisado (untamos el molde con mantequilla y espolvoreamos ligeramente con harina, desechando la que sobre)

Horneamos en horno precalentado a 180º, calor arriba y abajo, durante 45 minutos. Comprobad con una brocheta de madera, aunque al ser una tarta húmeda y jugosa no sale totalmente seca, pero sí limpia.

Dejamos enfriar dentro del molde y una vez fría espolvoreamos por encima con una mezcla de coco rallado y azúcar.

Para mi gusto estaba más rica al día siguiente.





Si escurrís todo el agua de la calabaza en lugar de quedar con la consistencia y textura de una tarta es probable que quede como un bizcocho, tal y como era la receta original.

Como veis lleva muy poca cantidad de grasa y de harina y mucha calabaza, por lo que es ideal para esos peques a los que les cuesta comer verduras y hortalizas. No temáis,  por el sabor no descubrirán que se trata de calabaza.

Me duró un par de días en perfecto estado a temperatura ambiente; si os va a durar más os recomiendo tenerla en la nevera.
 
Si os gustan estos dos ingredientes no dudéis en hacerla, está riquísima


Inspirada en Ana en la cocina

 



domingo, 21 de octubre de 2012

Mi cocina






En alguna ocasión, pensé hacer una entrada para mostraros la zona de mi casa   desde donde salen las recetas de este blog, pero tenía serias dudas de si os interesaría .
Isabel, una  mujer llena de buenas ideas y con el entusiasmo que la caracteriza, pensó lo mismo, pero ella lo llevó a la práctica  enseñandonos su cocina y animándonos a enseñar las nuestras. La propuesta ha tenido una gran acogida.
Si queréis ver lo preciosas que son algunas de las cocinas de otros blogueros, podéis pinchar AQUÍ.

Os voy a contar un poco más de este lugar de mi casa que tanto me gusta. Como veis por las fotos es grande, muy luminosa y sobre todo acogedora. Hace años que la reformamos incorporando parte de un gran tendedero. Cambiamos muchas cosas, pero mantuvimos algunos electrodomésticos, que vamos cambiando cuando se estropean, y los muebles de la zona de cocina, pues a pesar de no ser modernos, están en perfecto estado  y no es cuestión de tirarlos; aunque con los diseños actuales tan bonitos que hay , quedaría  magnífica con un toque moderno. Y como soñar no cuesta dinero, el tiempo dirá, pero de momento nos sentimos muy a gusto en ella tal y como está.

Os la presento:
 

Tiene dos accesos. Desde la puerta del vestíbulo se ve así:



Una columna sirve para delimitar la zona de comedor de la de cocina.





Un gran ventanal da acceso a una terraza tendedero, donde tengo la zona de lavado, secado y planchado y muchas plantas.




En el comedor, tengo un mueble hecho de pladur, madera y cristal, que hizo mi marido y que me sirve de zona de almacenaje.




El frigorífico está un poquito retirado, así hago deporte : D
La ventanita es un pasaplatos, que da a la zona de comedor del salón.



Espero que os haya gustado visitar mi cocina, desde ahora ya sabéis dónde paso parte de mi tiempo preparando las recetas que luego véis en el blog.







martes, 16 de octubre de 2012

Pan de leche en olla de pyrex

  

Creo recordar que en otra entrada  os comenté, que hay un antes y un después del inicio de este blog en cuestiones gastronómicas (en otras también, pero ese es otro tema :)) Una de ellas es la relativa a la elaboración del pan.
Visitando algunos blogs que se han especializado en el tema del pan, me he dado cuenta de su valor real, del mimo y dedicación que hay que tener para que salga una buena hogaza o una humilde barra. Ignorante total de masas madre, prefermentos, bigas... de harinas de centeno, de avena... Leo con mucho interés todo lo relativo a este laborioso proceso y acumulo una larga lista de recetas a la espera de que algún día tenga el tiempo , y el atrevimiento, suficientes para meterme de lleno en este mundo de tahonas.

No obstante, no quiero renunciar a disfrutar del placer de amasar, oler, hornear y comer mi propio pan. He hecho algunos panes, todos sencillos y de fácil elaboración, con muy buenos resultados. Uno de ellos es el famoso pan milagro o pan en olla de pyrex; muy fácil y rápido de hacer y que está muy rico.

Hace días, visitando el  blog The Yellow Kitchen  , me encontré con la receta del pan de leche elaborado en olla de pyrex y hasta que no lo he hecho no he parado.
Es un pan delicioso y tierno, con mucho sabor. Ideal para el desayuno o la merienda, sobre todo si lo acompañamos  con un poco de mermelada, chocolate o como el que yo desayuné, con mantequilla y azúcar en honor a mis meriendas infantiles.







INGREDIENTES:

  • 250 ml de leche entera
  • 50 gr de mantequilla a temperatura ambiente
  • 70 gr de azúcar
  • 1 cucharadita de sal
  • 450 gr de harina 
  • 25 gr (un dado) de levadura prensada
  • 1 pizca de vainilla en polvo
  • un par de cucharadas de leche


 


ELABORACIÓN:

Sacamos la mantequilla del frigorífico y la dejamos a temperatura ambiente
Mezclamos la harina con la sal y la ponemos en un bol, haciendo un hueco en el medio.
Añadimos el azúcar, la mantequilla y la vainilla, en el  hueco.
Templamos (¡ojo no calentamos!) la leche y añadimos la levadura fresca, mezclamos hasta que se disuelva. Vertemos en el hueco de harina.
Mezclamos todo con la mano o con una rasqueta de panadero, hasta que empiece a despegarsenos de la mano (puede que necesitéis un poco más de harina, en mi caso no la necesite). Amasamos bien hasta que nos quede una mezcla lisa, homogénea y flexible. Redondeamos la masa y le hacemos un corte en forma de cruz, con un cúter o cuchillo bien afilado. Pincelamos con un poco de aceite, mantequilla o una mezcla de huevo y leche.
Untamos una fuente de pyrex con un poco de aceite y ponemos la masa encima. Yo suelo ponerla en la tapa y cubro con la fuente, para que crezca hacia arriba.
Introducimos en el horno frío y cocemos a 200º con calor arriba y abajo, durante 40 minutos.
Si queréis que salga más esponjoso, poned un cacharro con agua en el fondo del horno durante la cocción.
Transcurridos los 40 minutos, sin apagar el horno, quitamos la fuente, pincelamos con leche el pan y dejamos que se dore un poco más.
Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.


 


Con esta pequeña aportación quiero contribuir a la celebración del Día Mundial del Pan,  y colaborar al homenaje de este sencillo, pero básico alimento.



 World Bread Day 2012 - 7th edition! Bake loaf of bread on October 16 and blog about it!








viernes, 12 de octubre de 2012

Requesón casero con miel y nueces




¿Recordáis la entrada del requesón casero? Podéis ver la receta AQUÍ.
 Lo empleé en ensaladas, untado sobre tostadas calentitas con un poco de azúcar por encima (¡delicioso!) y para hacer este postre tradicional y sencillo que es un deleite para el paladar.

Se puede comer de todo, pero la cuestión es la frecuencia y la cantidad. Me gustan los dulces y me pierden los postres con queso (bueno, los quesos en general),  que suelen ser con alto contenido en grasa, a los que solemos sumar natas y/o unas cantidades nada despreciables de azúcares; es innegable que están riquísimos, pero también que deberían  ser un capricho puntual, si queremos controlar las grasas de nuestros menús.

El requesón es de los lácteos más ligeros, solo 4 gr de grasa y 100 kcal (mucho menos que el queso fresco, 15 gr de grasa) Además es fácil de digerir y combina a la perfección tanto con salados como con dulces.
La miel no solo proporciona un sabor dulce, además de fructosa y glucosa posee vitaminas, minerales y enzimas a los que debe sus múltiples propiedades digestivas, laxantes, expectorantes...
En cuanto a las nueces cabe decir que en su composición abundan los ácidos grasos poliinsaturados, además de lecitina. Fuente de vitaminas B1, B2, B3 (niacina) y especialmente de B6. Esta vitamina interviene en el buen funcionamiento del cerebro, así como en la producción de glóbulos rojos en sangre. En minerales destaca el fósforo, el potasio y el magnesio.

Como habréis visto no solo es uno de nuestros postres más tradicionales, es  delicioso, bajo en calorías y  una gran fuente de propiedades nutricionales.

 


INGREDIENTES:
  • Requesón
  • Nueces
  • Miel
Me parece que en esta ocasión no hay mucho que explicar de su elaboración, un cuenco con el requesón casero, unas nueces troceadas y un chorrito de miel por encima y ya podemos disfrutar de un postre delicioso, facilísimo de hacer y que os dejará satisfechos.






No dejéis de probarlo, os encantará.


lunes, 8 de octubre de 2012

Higaditos de pollo encebollados, al Jerez






Soy de buen comer y hay pocas cosas que no me gusten. Casi todas las comidas o ingredientes que no me gustan, antes los he probado, pero algunos, como las ostras, reconozco que ni siquiera he hecho el intento de comerlos. Me repelen, sin más.
Eso es lo que sucede a algunas personas con el hígado; mi familia no hace ni el intento de comerlo. Por el contrario, a mi me encanta y no tengo ninguna pereza de hacerlo solo para mi, aunque lo como de forma moderada.
Igual pensáis que soy un poco rara por preferir un plato de higaditos de pollo a una ostra, pero así es la cosa.

En esta receta el vino de Jerez no es imprescindible, podemos usar otro vino, pero realza mucho el sabor del guiso. Hay gente que no le da ninguna importancia al vino que usa en la preparación de sus recetas, cualquiera les sirve y con frecuencia utilizan el más barato, pero a mi  la experiencia me ha demostrado que un buen vino marca la diferencia y le aporta a las recetas su aroma y personalidad.

Sin más, os dejo con la receta de estos ricos higaditos de pollo



INGREDIENTES:
  • 1/2 Kg de higaditos de pollo
  • 1 cebolla gorda
  • tomate frito casero
  • 3 dientes de ajo
  • 1 vaso de vino de Jerez 
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal
  • hojitas de tomillo

 

ELABORACIÓN:

Cortamos la cebolla y los ajos en juliana fina. Los sofreímos en una sartén con un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra.Cuando la cebolla esté pochada y el ajo dorado, añadimos el tomate frito (también podemos utilizar triturado) y dejamos que se haga a fuego lento, unos 5 minutos.

Limpiamos los higaditos, los secamos bien, los salpimentamos y los salteamos en una sartén con una cucharada de aceite de oliva. Tener cuidado porque saltan mucho.

Una vez que el sofrito está listo, le añadimos unas hojitas de tomillo y los higaditos salteados. Añadimos el vino  y dejamos que se hagan unos 5 minutos más.

Servimos caliente, espolvoreando por encima con unas hojitas de tomillo.














miércoles, 3 de octubre de 2012

Bizcocho de manzanas y canela





Con la llegada del otoño hay días en los que apetece recogerse en casa, y a la caída de la noche, arrebujarse bajo una ligera manta y tomar una bebida caliente con un buen trozo de bizcocho.

Mientras pensaba en ese acogedor plan otoñal y revisaba mis notas de bizcochos, encontré la receta perfecta en el sobre de la levadura. Un flechazo a primera vista... estas cosas suceden así  ; )

El resultado está a la vista: un delicioso y esponjoso bizcocho, donde la dulzura ácida de las manzanas combinan a la perfección con una especia tan aromática e intensa como la canela; no sé bien por qué ambas me evocan el otoño, quizás sea sus tonalidades.

¡No te lo puedes perder !


INGREDIENTES:

  • 2 huevos
  • 250 gr de azúcar
  • 40 gr de aceite de girasol
  • 2 cucharaditas de azúcar vainillado
  • 1 cucharadita de canela molida
  • 150 ml de leche 
  • 170 gr de harina de repostería
  • 6 gr de levadura química
  • 2 o 3 manzanas (golden, reineta...)
  • Mezcla de 2 cucharaditas de azúcar avainillado y 1/2 cucharadita de canela en polvo




























 




ELABORACIÓN:


Precalentamos el horno a 180º, con calor arriba y abajo.
Engrasamos un molde y lo enharinamos ligeramente, desechando el resto de harina.

Batimos los huevos, el azúcar, el aceite, la vainilla y la canela hasta conseguir una textura cremosa.

Mezclamos la harina con la levadura y tamizamos.

Añadimos esta mezcla y la leche a la crema anterior y removemos hasta conseguir una masa homogénea.

Vertemos en el molde.

Pelamos las manzanas, cortamos en medias lunas, eliminando las semillas y colocamos encima de la masa. Espolvoreamos con la mezcla de canela y azúcar avainillado

Horneamos entre 35 y 40 minutos aproximadamente o hasta que esté dorada.