Me gustan especialmente las recetas de nuestra gastronomía tradicional; esas recetas cargadas del sabor y el olor de la comida casera de nuestr@s abuel@s, siempre acompañadas de sus particulares historias.
Recetas de aprovechamiento, donde no se tiraba nada y que con lo poco que disponían hacían riquísimos y contundentes platos.
Y si pensamos en cocina tradicional española, las migas ocupan un destacado lugar. A mi me encantan, porque estan riquísimas y porque me permiten aprovechar la gran cantidad de pan que a diario me sobra. Reconozco que no es un plato muy light que digamos, pero si tenemos la precaución de hacerlo y comerlo con moderación no tenemos por qué privarnos de él.
Como en tantas otras recetas, en cuestión de migas cada región tiene su particular forma de hacerlas y cada uno le damos nuestro toque particular ; yo aprendí viéndoselas hacer a mi suegra y con la ayuda de un recetario y me quedan muy ricas y jugosas. Procuro no cargarlas de ingredientes grasos y acompañarlas de un segundo plato más ligero, para compensar.
Ingredientes:
- 300gr de migas de pan atrasadas de dos días, en trocitos
- 200gr de tocino o panceta
- 200gr de chistorra
- sal
- pimentón
- 2 dientes de ajo
- AOVE
Elaboración:
- Extendemos el pan troceado en una fuente, echamos sal y rociamos con agua (mojado, pero no empapado) Lo dejamos tapado un par de horas
- En una cazuela de barro (yo en sartén para no dañar la vitro)añadimos un poco de AOVE y freímos el tocino y/o la chistorra con los ajos enteros . Cuando este todo dorado, sacamos bien escurrido y reservamos.
- Añadimos el pan y removemos bien con una cuchara o espátula de madera, para que el pan se impregne con la grasilla y vaya desmigandose
- Echamos una cucharadita de pimentón y sofreimos hasta que haya tomado un bonito color dorado.
- Una vez apartadas del fuego, añadimos los ajos y el tocino y/o chistorra
Si nos podemos permitir acompañarlas de unos huevos fritos con su puntillita y unos pimientos fritos...¡ Un manjar!
Me encantan las migas, a mis hijas les gusta muchísimo y antes se las hacía de vez en cuando, pero es que terminas con dolor de brazo de tantas vueltas que hay quedarles!
ResponderEliminarTe han quedado perfectas, sueltas y tostaditas y como tu dices, acompañadas de pimientos y huevos fritos es ya para morirse!!
Besos,
Nasy
très bien fait et très appétissant
ResponderEliminarbonne journée
Recuerdo cómo las hacía la madre de mi tio que son de Piedrabuena (Ciudad Real) y eran fantásticas. Yo no me he atrevido a hacerlas.
ResponderEliminarBesos
que buenas, y con un huevo roto por encima ya serian de lujo
ResponderEliminar"Comerlas con moderación...."
ResponderEliminar¡Qué Moderación se busque la vida, las migas las quiero para mí solo!
¡Qué ricas!
(Tú me envidias por desayunar a la orilla del mar y yo te envidio a ti por vivir en "mi" Madrid, cos sus viejos barrios, sus bares de tapas, sus churrerias, sus cines, sus teatros, sus grandes librerías, su Rastro...)
¡MUAC!
Con lo que me gustan y me dá un respeto ponerme con ellas que no veas!, las como cuando las hace mi madre o mis hermanos, pero mira que me voy a atrever porque me has despertado el gusanillo.
ResponderEliminarUn besazo
Mmm, qué buenas Carmen!
ResponderEliminarNosotros no las hemos hecho nunca porque en mi casa el experto "miguero" es mi suegro (el día que hace hace para unas cuantas tandas y las congela). Algún día nos tendremos que animar.
Besos!
facilrapidoysano.blogspot.com
Carmennnn!!!! sólo las comí una vez en mi vida y me encantaron del todo!!!! y eran muy muy parecidas a estas que has hechooo!!!! eres una genia y necesito unas migas con urgenciaaaa!!!! ;-) geniales como tú!
ResponderEliminar;-)
Viendo la foto de la derecha creí que era pizza!!! ando muy mal de la vista... ;-)
ResponderEliminarNunca he probado las migas, puedes creerlo?
Tengo que hacerlas, sé que gustarán en casa.
Besinos
Qué pinta!! nunca he probado las migas! y no por falta de ganas porque tienen una pinta!! y lo del huevo frito con las puntillitas, aaaahhh, queeee ricooo!!
ResponderEliminarBesos
Tu lo has dicho, un verdadero manjar. Yo aún no las he hecho nunca, pero mi mami las borda y la última vez que vino a casa, se las pedí y me puse mala ese día y no las pude probar, buaaaa.
ResponderEliminarA ver si te las copio y me animo a catarlas!
un besito.
Mucahs veces de las que voy al pueblo las hacemos en la lumbre. Nos encantan. tengo unas que hicimos este otoño en el blog.
ResponderEliminarLas tuyas se ven sueltecitas y doradas como me gustan.
Un beso
recetas que valen la pena rescatar de las abuelas nada se botaba,todo sirve y se crea,muy linda y buena receta,bien preparada,abrazos y cariños.
ResponderEliminarNunca he comido migas y la verdad es que tengo muchas ganas de probarlas. No se porque es una receta que siempre me ha producido un cierto respeto. Viendo las tuyas tan sencillas seguro que me animo enseguida.
ResponderEliminarBesitos
¡Me encantan aunque nunca las he hecho!
ResponderEliminarcon tu receta me animo
sólo las he comido una vez, pero ahora me has hecho volver las ganas de volver a comerlas
ResponderEliminarCarmen, si tu hija va a Torino, encargale también unos gianduiotti, que son unos bombones alargaditos típicos de alli! o los cri cri (que a mi me gustan menos que los gianduiotti!). Si quieres saber cualquier cosa, no dudes en preguntarme (tienes mi correo en mi perfil de blogger, creo) y te cuento, que he estado un año enterito por alli!
ResponderEliminarBesos
Que recuerdos Carmen!!!! Mi abuela nos preparaba migas, y me has hecho venir el olor y el sabor de esas migas del pasado. Mi abuela es una viejecita encantadora de más de 95 años y ya no está para preparar migas, pero me has hecho venir ganas de comerlas. Igual cambiamos la tradición y yo se las preparo a ella.
ResponderEliminarBesotes y feliz fin de semana!!!!
Adoro las migas,éstas tuyas se ven divinas,sueltas y doradas...quién las pillara.
ResponderEliminarBonitas fotos.
Besitos.
Madre del amor Hermoso, si tu supieras lo que daba yo por comerme unas migas como esas!!!! en mi zona no se ven ni por casualidad así que cuando las veo me vuelvo loca... pero que cosa mas rica y que pinta tienennnnnnn
ResponderEliminarayyyy me voy que me pongo mala .. ja ja
bsts. maite
MIGASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS!!!
ResponderEliminarMe enseño mi abuela materna a hacerlas, era aragonesa. me gustan mucho aunque hace mil años que no como, tendré que hacerlas, esta entrada me ha heco ensalivar....
un abrazo
Carmen... me recuerdan a las de mi madre, riquísimas!!!! Besitos.
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios, siempre tan estimulantes.
ResponderEliminarEs un plato que os animo a probar y hacer. No es difícil, aunque hay que cogerle el punto para no tener pan frito en lugar de migas jugosas, por eso hay que estar muy pendientes al tenerlo al fuego y humedecerlo lo justo. El resultado merece la pena y es una de esas recetas que no hay que olvidar.
Que tengais un buen fin de semana y lo disfruteis. Besos
En toda Extremadura las siguen poniendo en muchos sitios para desayunar, junto con el café.
ResponderEliminarEste plato, curiosamente, existe en toda España. También son habituales en la cocina portuguesa, sobre todo en la alentejana.
Un besino.