Los pestiños no formaban parte de mi repertorio de postres tradicionales, hasta que entré a formar parte de una familia andaluza, que me los dieron a conocer y probar. Y es que este exquisito postre, de origen árabe, como gran parte de la gastronomía andaluza, es muy típico y popular en la Semana Santa andaluza. Aunque hay regiones en las que también son consumidos en las fiestas navideñas.
Como sucede con muchos dulces tradicionales hay muchas maneras de hacerlos- "cada maestrillo tiene su librillo"- Hay quienes los bañan en miel, otros los rebozan en azúcar y canela o quienes los "emborrachan" antes de freírlos, quienes los rellenan con cabello de ángel... Algunas recetas utilizan bicarbonato, otras levadura y algunas ninguna de las dos. Quienes les añaden vino blanco seco o vino dulce o zumo de naranja. El tamaño y la forma también pueden tener alguna variación de unos lugares a otros.
En cualquier caso, a pesar de las variaciones en el proceso de elaboración y acabado, los ingredientes básicos de esta receta permanecen inalterados.
Yo he optado por la receta tradicional de pestiños y aunque me encantan con miel, en esta ocasión los he rebozado en canela y azúcar.
INGREDIENTES:
- 100 ml de aceite de oliva
- 1 cucharada de anís en grano o matalahúva
- la cáscara de un limón o de media naranja
- 100 ml de vino seco
- 300 gr de harina
- 1 cucharada de levadura
- una pizca de sal
- aceite de oliva para freír
- Azúcar
- Canela en polvo
ELABORACIÓN:
- Verter en una sartén el aceite de oliva junto con la cáscara de limón o naranja y freír durante un minuto. Añadimos los granos de anís o matalahúva y retiramos del fuego. Dejamos enfriar.
- Colamos el aceite hasta completar un vasito (100 ml) ; aunque si eres de l@s que te gusta encontrarte con los granos de anís en el pestiño, solo tienes que retirar la piel de la naranja o limón.
- En un cuenco amplio ponemos la harina mezclada con la levadura y la sal. Hacemos un hueco en el centro y vertemos el aceite que habíamos colado y el vino blanco. Removemos todo bien hasta formar una mezcla homogénea, espolvoreamos una superficie lisa con harina y trabajamos bien la masa.
- Dejamos que repose durante 30 minutos, aproximadamente, a continuación formamos bolitas y las estiramos con un rodillo. Cuanto más fina esté la masa, mejor.
- Doblamos la masa formando pequeños pañuelos o lazos.
Si nos gustan más con MIEL hacemos un almíbar con:
- 250 gr de miel
- un chorrito de vino blanco
- azúcar para espolvorear
Imposible comer solo uno o dos... quizás tres Jajaja. Irresistibles!!!