lunes, 15 de marzo de 2010
Sardinas a la sal
Me encanta comer sardinas asadas, pero siempre las comía fuera de casa, por la humareda que forman y los intensos olores.
Viendo una receta en la tele he encontrado la solución: Sardinas a la sal, cual si de dorada o lubina se tratase. Fácil, sencillo y sobre todo, limpio.
* Sardinas
* Sal gorda
* Clara de huevo
* 1 cucharada de agua
- Batimos la clara , la mezclamos con la sal y con la cucharada de agua
- Ponemos una capa en un recipiente,
- Colocamos encima las sardinas enteras
- Cubrimos con otra capa de sal, procurando que queden bien cubiertas todas las sardinas. Apretamos un poco con la mano.
- Horno precalentado, 200º durante 15 minutos, calor arriba y abajo
- Una vez fuera del horno, retiramos con cuidado la costra de sal de encima y retiramos las sardinas, que estarán en su punto y riquísimas.
Publicado por
Carmen
en
15.3.10
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Etiquetas:
Pescados
9 comentarios:
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Carmen, cuando vea estas sardinas mi marido quedará encantado, el pescado, sobre todo si es fresco no necesita gran preparación y las sardinitas.... que ricas son!!!
ResponderEliminarTe quedaron estupendas.
He de decirte que me quedo prendada de las rosquillas anteriores y la forma de hacerlas, si no entendí mal unas las dos bolitas ¿verdad?
Bueno, no sabes con que buen sabor de boca me voy, comida y postre!!! Gracias.
¡Ahhh, si parece mi comentario parece una carta! Jajaja.
Biquiños y hasta la vuelta.
ÑAM ÑAM
ResponderEliminarLa verdad es que son sabrosas y no estan nada mal de precio.
Esto si es un buen plato pá mi...jajajaj
Un abrazo cocinerita
Hola Marisa,
ResponderEliminarSí tienes sitio donde asar las sardinas sin miedo a los olores, es lo mejor , sin duda.
En cuanto a las rosquillas, sí, se hacen dos bolitas pequeñas, se unen y se hace el agujerito; de ese modo queda el surco intermedio (fijate en la foto)
Un beso.
Pluvisca,
¡¡¡ Menos mal, jamia !!!
Besoooooooooos
No soy amiga de comer sardinas, y si me gusta la dorada, que probaré con tu receta.
ResponderEliminarLo que si me gusta son las antxoas, y después de cinco años sin pescarlas en el Cantabrico, hoy he comido las primeras fritas con ajito y guindilla. riquisiiiiiiiiiiiimas y a 6 euros
Me gustan de todas las maneras, rebozadas, en vinagre, en salsa verde, fritas.
Un beso Carmen
Las sardinas y yo tenemos una especie de amor-odio, me gusta verlas, y como huelen, pero luego enseguida mi cuerpo las rechaza...Lo que sí heprobado es la receta de dorada a la sal y sale riquísima.....
ResponderEliminarUn besico saladillo...
Contrapunto,
ResponderEliminarSi no has hecho nunca la dorada, o la lubina, a la sal, te lo recomiendo porque sale exquisita.
Puedes acompañarla con una salsa de langostinos (a ver si me acuerdo de ponerosla)o la que te apetezca.
¡¡¡ La antxoas del Cantábrico... peccato di Cardinale. Qué ricas !!!
Un beso.
Hola Colibrí, bienvenida otra vez al mundo bloguero ;D
ResponderEliminarA mi me gusta el olor de las sardinas... pero fuera de mi casa jajaja Por eso busco los modos de cocinarlas sin olor, o el menos posible, y este es uno de ellos. Además, apenas manchamos nada.
Un beso.
Buffff...paso de largo de este post...¡odio las sardinas!!
ResponderEliminarBesos
Jajaja Tita, si no gustan, no gustan y no hay más.
ResponderEliminarUn beso, guapa.